Mis pinceladas: Templo de Debod

Luz del atardecer en una tarde de invierno. El juego entre la luz natural y los tímidos focos ayudan a resaltar la belleza del lugar.

Oleo sobre lienzo 83 x 65

Mi perfil

Nació en Tortuera (Guadalajara). Maestro. Licenciado en Ciencias de la Educación. Especialidad Orientación Escolar. Su vida profesional la ha dedicado a la educación, en diferentes niveles educativos.

Desde sus primeras etapas escolares destaca su habilidad para dibujar, así es reconocida por sus maestros, que le asignan la tarea de dibujar en la pizarra del aula los dibujos que deben reproducir los alumnos en sus cuadernos, es el primer reconocimiento explícito de esa capacidad y siguen recordando este hecho los que fueron sus primeros compañeros de escuela, en su pueblo natal.

Más tarde, en su periodo formativo, el dibujo y la pintura fueron siempre un "jovi" para él, su afición le hizo ir probando con diferentes técnicas, pronto definió su interés por el oleo, sin dejar de lado el acrílico y la acuarela, habiendo trabajado previamente el dibujo con lápices, sanguina, carboncillo... de forma brillante, ya que su gran mérito es el dominio del dibujo.

Su vida profesional dedicada a la educación, le ha permitido en algún momento de su trayectoria poder trasmitir a su alumnado sus conocimientos pictóricos y sus habilidades para descubrir el mundo del dibujo como una forma de expresión personal.

Si bien en sus inicios hubo mucha formación autodidacta, se acercó en varios momentos a profesionales cualificados en las diferentes técnicas y en muy diversas tendencias con el fin de pulir los errores en los que a veces se cae, sin ser consciente de ellos, cuando la formación es autodidacta. De cada una de estas experiencias de aprendizaje guarda trabajos de gran calidad y variedad, que los considera parte del proceso de su evolución.

Siempre ha dedicado buena parte de su tiempo libre a la pintura, practicándola en ocasiones y visitando exposiciones con gran asiduidad, lo suyo no ha sido crear desde la nada, ha habido previamente un camino largo y silencioso dedicado a cultivar una base en la que apoyar su trabajo.

En la última etapa de su recorrido pictórico se ha definido por la pintura realista, no alejándose de ciertos matices impresionistas, tanto en los trazos como en las tonalidades que son reales pero no exentas de matices personales por los que aflora su sensibilidad y su forma equilibrada de entender la vida y la pintura como parte de la misma. Su paleta de colores es muy reducida, pero su gama de tonalidades es infinita porque su habilidad para buscar nuevos matices es algo que se intuye fácilmente en sus creaciones.

Los temas elegidos son muy diversos, aunque se agrupan en unos descriptores bien concretos y normalmente los trabaja de manera contextualizada y sistemática. Ha dedicado un tiempo intenso a los bodegones y naturalezas muertas y son reconocibles por el matiz que identifica su forma de pintar.

Últimamente el agua podría definirse como el hilo conductor de su pintura. Sus ríos y el reflejo de sus puentes en el agua es uno de sus méritos incuestionables, invitan a contemplarlos y a disfrutar del leve movimiento que les confiere a sus aguas. Pero para nada hemos de dejar de mencionar su capacidad para las marinas, tanto de aguas tranquilas, como las que tienen una mayor movilidad y que van acercando las olas hasta la proximidad de la arena, que es posiblemente uno de sus mayores logros, tanto los brillos que confiere el sol a sus arenas como el agua que queda remansada en ellas, tras el regreso de la ola, confiere a sus marinas una vida propia. Y sin abandonar el agua hay que detenerse en sus cuadros nevados, el juego y la capacidad de sacar tonalidades del blanco níveo es algo muy valorado y meritorio de sus creaciones.

Las arquitecturas pintadas son la modalidad que le permite poner en juego su capacidad pictórica y el dominio de la proporciones que tanto ayuda a entender y disfrutar de un dibujo bien trazado. Siendo muy realista su línea de trabajo, no llega a identificarse con una toma fotográfica sino que tienen esa pátina personal, él destaca su aportación personal como una forma de expresión y de mostrar su impresión previa que le ayuda a entender lo que quiere comunicar con su ejecución.

Otra de sus aportaciones ha sido la incorporación de la figura humana a sus paisajes, éstos ganan en calidad, porque no son figuras estáticas, sino integradas en el entorno y forman un todo más vivo y expresivo.

De sus obras se puede destacar la coherencia final, él habla de conseguir cerrar el cuadro, de darle identidad y lo consigue. Un aspecto que está presente en todos sus paisajes es el valor añadido de sus cielos, que ayudan a transportarse a una realidad viva.

Todas sus creaciones han sido previamente paseadas y vividas, los paisajes que reproduce los ha visitado y estudiado, "in situ" toma una serie de notas y realiza un pequeño boceto que luego en la tranquilidad del estudio le permite reinterpretar y plasmar, ayudándose de cantidad de fotos. En los paisajes de los lugares próximos no se conforma con las notas tomadas, sino que durante el proceso de ejecución vuelve las veces que necesita para confirmar que está haciendo lo que responde a la impresión recibida, para ello necesita buscar las luces que correspondan a la que decidió plasmar en su día. Esta forma de trabajar le permite disfrutar de su trabajo e incorporarlo a su vida, de alguna forma en este momento de su trayectoria vital la pintura no es algo accidental, más bien es uno de los ejes que marcan las opciones de a qué, cómo y cuándo dedica su tiempo, ahora que dispone de él con libertad.

Ha sido muy reacio a mostrar su obra, lo ha compartido muy gustosamente con amistades, con familia, pero le parecía siempre que hacía falta mucha madurez para exhibir el trabajo personal y su gran sensibilidad y respeto hacia los demás le ha hecho ser muy cauto, porque considera que a las personas que visitan una exposición hay que hacerles disfrutar de lo que ven y ser capaz de trasmitirles esa magia que durante el proceso de elaboración él vive. Por esta razón ha guardado durante muchos años su trabajo, hasta que se ha convencido de que los comentarios que le hacían los demás no se alejaban de lo que él encontraba en sus obras, esto ha sido un aliciente a la hora de decidirse a exponer su trabajo, primero en exposiciones colectivas, ya que en su entorno próximo hay muchas personas con las que ha ido encontrando gran afinidad a lo largo de su recorrido por el mundo de la pintura. Pero fue tras su primera exposición individual en su pueblo natal, en la que tuvo un éxito rotundo cuando se decidió a sacar los cuadros de casa y a compartirlos con las personas que quisieran verlos, valorarlos, disfrutarlos...

En definitiva, si visitas su obra vas a poder descubrir, luz, serenidad, volúmenes, matices, arte y disfrutarás de su contemplación, es el resumen de las opiniones de las personas que han visitado sus exposiciones.

Para Contactar:

alejandroaynos@gmail.com

663487794

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Templo de Debod - Madrid

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